El Corredor del Laberinto - Jamer Dashner

Sinopsis

«Bienvenido al Claro. Verás que una vez a la semana, siempre el mismo día y a la misma hora, nos llegan víveres. Una vez al mes, siempre el mismo día y a la misma hora, aparece un nuevo chico, como tú. Siempre un chico. Como ves, este lugar está cercado por muros de piedra. Has de saber que estos muros se abren por la mañana y se cierran por la noche, siempre a la hora exacta. Al otro lado se encuentra el laberinto. De noche, las puertas se cierran y, si quieres sobrevivir, no debes estar allí para entonces».

   Todo sigue un orden y, sin embargo, al día siguiente suena una alarma. Significa que ha llegado alguien más. Para asombro de todos, es una chica.

   Su llegada vendrá acompañada de un mensaje que cambiará las reglas del juego.

¿Y si un día abrieras los ojos y te vieses en un lugar desconocido sin saber nada más que tu nombre?

   Cuando Thomas despierta, se encuentra en una especie de ascensor. No recuerda qué edad tiene, quién es ni cómo es su rostro. Sólo su nombre.

   De pronto, el ascensor da un zarandeo y se detiene. Las puertas se abren y una multitud de rostros le recibe. «Bienvenido al Claro —dice uno de los adolescentes—. Aquí es donde vivimos. Esta es nuestra casa. Fuera está el laberinto. Yo soy Alby; él, Newt. Y tú eres el primero desde que mataron a Nick».

• Editorial Nocturna Ediciones
• Autor James Dashner
• Título Original The Maze Runner
• Número de Páginas 532 -con epílogo-
• ISBN 9788493801311

Opinión personal

Cuando acabé el libro me quedé un poco en estado de shock. No sabía que pensar ni decir. Es verdad que el final fue todo muy instantáneo, demasiado. Así que las emociones se me acumulaban rápidamente.

La historia empieza con Thomas, nuestro protagonista en la caja, que es un ascensor donde el mismo día de cada mes aparece un chico y el mismo día de cada semana aparecen víveres. Nada más salir de aquel sitio, se encuentra rodeado de adolescentes, que empiezan a gritar cosas sin sentido, palabra que nuestro protagonista no entiende y el sentimiento de confusión aparece al momento. La verdad es que te identificas con el personaje, porque tampoco entiendes lo que dicen, pero poco a poco te acostumbra, como hace el chico y sin darte cuenta acabas por entenderlo todo.

   El Claro es un lugar dividido en cuatro zonas, delimitado por las paredes del laberinto. Solamente los corredores son los que salen ahí fuera, porque es peligroso andar entre monstruos, los laceradores. Estos bichos son medio insecto medio máquina y tienen a los clarianos acobardados por el cambio. 

   Thomas empieza a probar con diferentes trabajos, cuando al día siguiente suena la alarma de la caja y todos acuden a ver lo que pasa. Todos muy extrañados y el chico sin saber que pasa, ven a una chica moribunda en el interior del ascensor. 

Esta, junto a nuestro chico, jugarán un papel crucial a la hora de acabar el juego.

   En resumen, es un libro lleno de acción y nada de amor, muy adictivo y algo predecible.

—1/2—